Campanito

Estoy viendo Tinkerbell.

Híjole, pero lo mejor de toda la película es que hay hadas hombre. ¿Se dirá hados?

Quiero que me quiero disfrazar otra vez de hadito para Jalowin.Pero lo más importante, lo que realmente quiero, es alguien que esté dispuesto a verla conmigo.

Por la boca

Algo que me queda bien claro es que por la boca muere el pez (uy, si estoy bien enojado en estos momentos).

Lo digo yo, que tengo la boca del tamaño del mundo y tiro por viaje la cago.

Hay una serie de momentos cuando uno no debe de decir nada: cuando se está enojado, ardido o triste, cuando se está cansado o hambriento y cuando se está borracho.

Porque uno solito se echa la soga al cuello.

!Qué no?

Pd. Aguascalientes está bien bonito, pero la gente habla raro. A los esquites les dicen chascas y a los chicharrones con cueritos, duros preparados. También comen una cosa que se llama Lechón, pero por más que investigué, no me enteré nunca que era.

Edición posterior: si estoy consciente que un lechón es un puerco en infancia (¿eso existirá?), lo que no sé es cómo lo cocinan en por allá, que hay puestos de lámina y restaurantes que venden lechón. Como había uno que se llamaba Lechón el Amigo Chucho.

En conferencia

Mientras escribo esto, estoy redactando una nota de prensa.

Estoy en la Conferencia de Logística del quince Congreso de Comercio Exterior Mexicano.

Tengo mucho calor, el salón de conferencias está pero si bien lleno.

Hago mi nota mientras escribo lo que dicen. Es relativamente sencillo, sólo hay que pensar cómo estructurar la información.

Esta es mi cuarta nota del día.

La sede del Congreso es Aguascalientes. Es mi primer viaje como repor-tonto.

Aguascalientes está bonito, pensé que era un rancho grandote. Y si es, pero es un rancho moderno y bonito.

Me caigo del sueño. Mucho.

Mañana estará el Presidente. Pero no creo poder entrevistarlo, porque los del Estado Mayor se ponen locos y empujan.

Totales

Ni fui a la Lagunilla, porque al Kiko y a mi nos dio hueva y mejor nos quedamos a platicar en mi casa hasta las 5pm.

Bueno, luego de que nos despertamos a las 12, porque llegamos a las 5.

Uy, tenía tanto que no me desvelaba tanto, estoy pagando caro el precio.

Mañana tengo que ir a trabajar.

Hay cosas que uno puede elegir y hay cosas que son como son.

Pero independientemente de eso, siempre hay que hacer lo posible por sacar lo mejor de una situación.

Así que mejor hacerlo con una sonrisa.

Y hay un nuevo blog en el roll, hay que verlo.

Chim pon (hoy me siento oriental)

Pérense, gran disclaimer, les advierto desde antes: Si no tienen nada pero nada mejor qué hacer, vean este video.



Este post lo escribí antes, pero se publicó a media mañana del domingo, más o menos.

Si todo sale como debe de ser, ahorita yo debo de andar por la Lagunilla buscando disfraces, ya contaré.

Razones para ser feliz

Ya me pagaron mi primer quincena.

Fue un momento emocionante, explicaré por qué.

Mi salario de esta quincena es más de lo que ganaba en un mes promedio en mis otros dos trabajos juntos.

Esa es una buena razón para ser feliz.

Ahora, una razón para no ser tan feliz es la cantidad de impuestos que se pagan. Híjole, es un robo en despoblado, qué bruto.

En lo que gasté mi primer sueldo: pagar mis tarjetas de crédito. Blef. (También invité a comer a mi Má.)

Para alguien de mi (anterior) ingreso adquisitivo, tener tres plásticos mágicos era una bendición y una maldición. Por una parte, podía comprar y gastar sin relativo límite, por otra, a la hora de pagar pues se me iba toda mi lana. Bueno, se sigue llendo.

Para saldar mi deuda con las honorables instituciones crediticias siguen comprometidas las siguientes seis quincenas de mi sueldo.

Pero luego ya estaré libre de culpas para gastar a lo bruto.

A que sí.

Nada que decir

Hace mucho que no posteo.

Pero es que no tengo mucho que decir.

Digo, la verdad del asunto es que de una semana para acá mi vida se ha acabado, pretty much.

Si estoy en la redacción casi 11 horas al día, pues no me da para hacer mucho: como, duermo, voy al baño. A eso se reducen mis actividades.

Y si yo dijera, es que qué bruto, mi trabajo es bien divertido, pues no necesariamente, porque la última semana he vivido con el estómago en el suelo del miedo que me da la posibilidad de que me corran por inepto.

Es que cuando uno se da cuenta de la ineptitud ajena, pues hasta se ríe. Pero cuando uno nota la ineptitud propia, duele refeo.

Bueno, quizá algo interesante: tengo un hematoma negro en la pierna derecha del tamaño de mi palma y se ve feísimo.

Pasteles de cumpleaños

Diario tengo que entregar una nota antes de la 1pm para que la consideren para la versión impresa del periódico.

A este día, no lo había logrado. Pero hoy no sólo mandé una, mandé dos. Y apenas son las 12.

No sé si van a entrar en la edición, igual y sí los dioses del periodismo me sonríen. Yo creo que son buenas piezas, pero no sé que opinen los editores.

En lo que mi jefito las revisa y me indica correcciones, voy a contar una cosa bien chistosa.

Aquí en la redacción los empleados tienen derecho a que en sus cumpleaños les den un pastel y es tradición que se parta entre los compañeros y se canten las mañanitas.

Todos los días se escucha, desde alguna parte de la redacción, a voces desafinadas desear feliz cumpleaños.

Desde que yo estoy aquí, en mi sección ha habido tres cumpleaños. Y eso que sólo llevo una semana.

Y ahi tienen al Conejitocisne moviendo la boca pretendiendo que canta, porque tampoco es para espantar a nadie con mi voz, y felicitando a personas que ni su nombre sabe.

Chale. Si me da friki, la verdad.

Edición posterior (19:41): No es broma, acabo de celebrar mi cuarto pastel. Y de las dos notas, aceptaron una entera y usaron información de la otra.

Espurio

Es que independientemente de lo que se pueda sentir o pensar sobre el Presidente Calderón, la libertad de expresión tiene que ser defendida.

La privación de la libertad sin causa es anticonstitucional. Pero aparentemente, a quienes estaban en la ceremonia les importó más que todo se viera bonito a respetar la ley.

Dan penita ajena.

Para saber más de Andrés Gómez "Zanahorio", está este artículo.

Las cosas que siento

Hay cosas y hay cosas.

Por ejemplo, después de una semana de trabajar me duelen las puntas de los dedos. En serio.

De tanto teclear en una computadora, me duelen las yemas (que cagado nombre) y pues como que no está tan padre.

Además, se siente raro estar tanto tiempo en una computadora que no es la propia. Como que me siento infiel.

Bueno, no. Cuando he sido infiel no he sentido tan feo.

Estaba navegando en hi5 y de algún modo llegué a la página de este morro:Y entonces no me quedó más que sentirme feo feísimo.

Para ver la colección completa de 98 fotos del tipo y sentir como la autoestima se va por el caño, hay que ir aquí.

Y digo la autoestima general, sin aclarar hombres o mujeres por lo siguiente:
Si se es hombre, porque nunca será uno asi de guapete, sabroso, deseable y demás como él.
Si se es mujer, porque el chavo es gay y nunca de los nuncas saldrá con una vieja.

Ora pues.

Cae primero un hablador...

No es cierto, el dios del periódico me castigó por mentiroso.

Según yo, ayer no tenía nada qué hacer y por eso posteaba mejor en lugar de andarme picando los ojos.

Pues no es cierto.

Luego de que eso publiqué aquí, me cayó una infinidad de trabajo.

Total, me fui de aquí a las 9pm.

Buh.

Para que se me quite lo hablador.