miércoles, 31 de diciembre de 2008

Año nuevo, ¿vida nueva?

Antes que acabe el año, haré mis propósitos para 2009.

Así, cuando llegue 2010 y relea este post me podré atormentarme a mí mismo por todo lo que no hice.

1. Titularme. Es el tercer año que está al top de mi lista, y sigo sin cumplirlo. Pero de este año no paso. Lo juro.

2. Ahorrar el diez por ciento de mi sueldo, íntegramente. Y ya que estoy en la parte monetaria, controlar mi gasto con las tarjetas de crédito, incluyendo no comprar algo cada que me sienta triste o enojado o feliz o bueno, está la idea plasmada.

3. Hacer ejercicio y comer saludable, para verme así:
Nomás.
Feliz año para todos.

lunes, 29 de diciembre de 2008

Update noticioso

En lo que mi vida transcurre, muchas cosas pasan, pero de repente no tengo tiempo para darme cuenta de ellas. O dar cuenta de ellas, más bien. Entonces, en lo que mi jefe revisa un par de cosas para que pueda seguir trabajando, narraré el escabroso acontecimiento que ha quedado en suspenso.

El viernes de la semana que terminó antes de la que acaba de pasar, o sea del 15 al 21 de diciembre para no crear confusiones temporales, postee que me quería morir porque la había regado.

Yo sentía que me iban a correr. Y no me corrieron, pero casi.

Lo que pasó, más bien, fue que me extendieron el periodo de examinación. Toing, golpe al ego.

Yo estoy contratado a prueba, y ese tiempo tendría que haber durado tres meses. Alrededor de estas fechas, tendría que haber firmando mi contrato de planta, si mi desempeño resultaba adecuado y todo eso.

En charlas anteriores, mi Jefito ya me había mencionado que dificilmente no me iban a contratar, porque aunque con algunas deficiencias corregibles, había demostrado que podía (¿puedo?) llegar a ser un buen reportero.

Hasta ese día. El Boss, al que pocas veces había visto así de molesto, me metió en un cuartito y luego de gritonearme un poco (mientras yo me apretaba un huevo para no llorar) me enseñó mi contrato y me dijo que iban a considerar, él y los jefes superiores, lo de la planta.

Bolas, perico. Tómala, barbón. Sóbese, que duele. (Se puede añadir aquí todas esas expresiones que, al menos yo, usaba en la primaria para burlarme de situaciones como ésta.)

Pues si. Llegó el lunes y me avisan que, por favor, bajara a Recursos Humanos. Mientras me dirigía hacia allá (que está del otro lado del edificio) sólo podía pensar en que una de dos, o me acababan de correr o me daban el definitivo.

Al final, ni el uno ni el otro. Estoy otro mes sin definitividad, y los beneficios que ello conlleva.

Lo único que me queda, realmente, es que tengo que trabajar más.

domingo, 28 de diciembre de 2008

Azul

Hay muchas maneras de ver el azul: esa es la manera en la que yo entiendo el amor.

Creo que puedes tener tonalidades desvaídas, matices fuertes o transparencias y sombras, pero sigue siendo, en esencia, lo mismo: es amor en tono celeste, prusia, rey, turquesa, ultramar, cerúleo, cian, cobalto; matizado de mar, de luna, de cielo, de moras, de nomeolvides.

Sin embargo, puede también aparecer del color que tienen los tiburones o los ahogados. Pero sigue siendo azul.

viernes, 19 de diciembre de 2008

Me quiero morir

Hoy si la cagué y feo.

Otra vez salí en portada de Negocios.

El tercer párrafo trae un error de hecho monumental. Debí haber comprobado, pero me fui con la primer declaración y lo mandé y salió.

Me quiero morir. Por más que lo intento, no logro ser un buen periodista. Trabajo como mínimo 9 horas al día, pero nomás no lo logro.

Ya le dije a mi jefe. A ver qué pasa.

lunes, 15 de diciembre de 2008

Tomados de la mano

Hoy vi a aquellos, los que dicen que se quieren, pasear tomados de la mano.

Se sujetan como si eso resultara una manera formidable de comunicación o les brindara la certeza del mañana, como si eso explicara los misterios de un secreto que sólo ellos conocen.

Caminan, conversan, ríen, observan, comparten.

Tienen en los ojos el brillo de quien se siente querido, aunque no saben si será por unos minutos, por unas semanas o por toda la vida. Se nota en su cara la felicidad de estar protegidos por ese lazo tan frágil pero a la vez tan fuerte.

¿Será que es una caricia mágica, una especie de llave que abre sentimientos y cierra heridas?

Es que parece que aquellos, los que dicen que se quieren, tienen el mundo seguro. Por como caminan y conversan y ríen y observan y comparten.

Porque poseen, sin temor a equivocarse y aunque sea nada más por un breve fragmento de tiempo, las alas más estables para volar.

Hace mucho que a mi nadie me toma de la mano para caminar.

viernes, 12 de diciembre de 2008

La vida de los elefantes

No he tenido tiempo de acabar los encargos, y eso que ya están empezados.
En lo que termino lean esta nota, que salió en (mi) el periódico.

Viven más elefantes en libertad
Boston, Estados Unidos (12 diciembre 2008).- Los elefantes en los zoológicos no viven tanto como los que gozan de libertad, indicó un estudio que seguramente dará pie a un acalorado debate.

Los investigadores compararon la vida de los elefantes en los zoológicos europeos con los que viven en el Parque Nacional Amboseli, en Kenia, y otros que trabajan en una empresa de madera en Myanmar, en el sudeste asiático. Los animales silvestres o los que trabajan en condiciones naturales vivieron el doble o más que los de los zoológicos.

Les faltó agregar: "También los que no viven en un circo y los atropellan a media carretera viven más".

martes, 9 de diciembre de 2008

Posada de oficina

En lo que está el siguiente texto por encargo, haré un breve paréntesis para contar algo sobre mi (patética) vida.

El viernes es la posada del periódico, donde toda la empresa se junta porque mezclan a todas las áreas, que normalmente no tienen contacto y hay una (conbebencia) convivencia, altos ejecutivos incluídos*.

Ahora bien, la invitación dice que novi@s/espos@s son bienvenidos. He ahí mi predicamento.

Dado que yo no tengo nada de lo que arriba se menciona (ni perro que me ladre siquiera)*, pues he pensado llevar a un amigo.

Ah, la noticia. Tengo un nuevo amigo. Es moreno, tiene unos ojos preciosos, es (estúpidamente) peludo y me da mucho calor. Está chulo como él solo.

¿La gente que trabaja en el periódico me verá muy feo si llego al evento con él?

Abajo anexo una foto para tener una idea de lo que me refiero.

Por cierto, al rato será el intercambio de la sección, seguro habrá cosas divertidas que comentar al respecto.



El amigo Oso. A que es guapo.

*Algo de lo que aquí se menciona puede estar un poco (o mucho) exagerado.

lunes, 8 de diciembre de 2008

La inexistencia del ánimo de lo invisible

Me lo sigo repitiendo a mí mismo.

No existes, no existes, no existes. Sólo eres un invento de mi cabeza, del que mi corazón se enamoró. No te extraño, no te quiero abrazar, no te vas a enterar por lo que estoy pasando ni de cómo lo voy a superar. Porque no existes.

Lo repito una y otra vez para asegurarme que no hubo canciones ni sonrisas ni cariño; tampoco hubo peleas ni tristezas ni llanto.

Nunca me acostumbré a tus brazos ni descubrí tus cicatrices, nunca te incorporé a mis sueños ni te volví mis esperanzas, nunca te dije que no te fueras y tampoco te dije que iba a estar bien cuando no estuvieras, nunca te cobijé y jamás te regalé estrella alguna.

Nunca te pedí un beso, menos te ofrecí amor.

Me lo tengo que seguir repitiendo, porque desde que tú no existes, yo soy invisible.

****
Encargo de Yeux

viernes, 5 de diciembre de 2008

Escrituras por encargo: cerrado

Hola a todos,

Gracias por dejar sus sugerencias. La próxima semana verán por aquí sus sugerencias, ya las empecé a draftear (jojo).

Por cierto, ¿les sobran doce pesos? Compren el periódico donde escribo (ese del cual no digo el nombre pero trae al Ángel de la Independencia en la portada y se llama como una callesota) y vayan a la sección de Negocios. La nota principal que aparece en portada y trae la cabeza en letrototototas es mía (ni busquen mi nombre, porque hasta que no tenga planta no me firman las notas, nomás dice Staff).

lunes, 1 de diciembre de 2008

Dictado: Pedir no cuesta nada

Hoy hay dictado (pero no son oraciones cortas).

1. Tengo el cerebro muerto, pero esta semana si tengo razón: la gripa que corre implacablemente por mi cuerpo. Llevo como tres semanas en distintos grados de podredumbre, pero actualmente estoy en la peor: moco interminable y tos de tuberculoso que hacen que todo el mundo me vea (más) feo.

2. Llegué a dos conclusiones, las cuales nacen del mismo pensamiento: no me voy a preocupar por la incertidumbre; la primera tiene que ver con la cabeza y la segunda con el corazón. Porque si me van a correr o si me van a querer, depende en medida de mi pero también son cosas que no puedo controlar. Que las cosas duren lo que tengan que durar.

3. Quiero un tatuaje, más y más y más y más. Pueden ser un par de estrellas en la cadera, una de cada lado o un par de mariposas/libélulas en la pantorrilla. Aunque muchas veces ya me lo había planteado, en este momento de mi vida me siento capaz de hacerlo.

4. En el último libro que leí, la protagonista escribía un poco por encargo: le daban temas y ella desarrollaba el escrito según lo que sentía y pensaba en ese momento. Se me hizo un ejercicio bien interesante; entonces, esta semana si alguien gusta dejar un tópico para que yo lo desarrolle, juro que lo intentaré. ¡Pero no prometo que el resultado sea bueno!